Una luz, siempre

Saltar de la cama por la mañana porque tienes un motivo. Poner la canción que te saca una sonrisa y te hace bailar mientras te vistes. Mirarte al espejo y ver todo lo bueno que tienes. Prepararte un bol de "hoy me como el mundo".

Aunque hoy el Sol no brilla, tu mirada lo hace por él y llevas el calor del Sol a quien no le llega.
Una sonrisa, siempre.
Un abrazo, siempre.
Un beso, siempre.
Una luz, siempre.

Hoy es un buen día porque así lo has decidido, así será y nada lo puede cambiar. Si la cagas, te ríes. Si la vuelves a cagar, te vuelves a reír. Porque hoy es un buen día, sólo porque haces lo que te hace saltar de la cama, porque eres feliz, haces sólo lo que así te hace sentir. Puedes cagarla otra vez, date permiso, pero nunca te menosprecies, en este mundo no hay nadie idéntico a ti, eres único y eso te hace especial, sólo por eso: quiérete, mímate y haz lo que te haga feliz. ¿Miedo? ¿quién dijo miedo?

Sólo hay una vida y no puedes dejar pasar ni un sólo día sin sentirte afortunado y sin pasarlo como tú quieres y con quién tu quieres. Lánzate a VIVIR y deja de matar el tiempo hasta que él te mate a ti.

Todos los días son un buen día si tú decides que así sea. Ama el milagro de tu existencia, pasión, sobre todo pasión. Vive tu vida con pasión y tú serás el motivo por el que salga el sol.

Mi verdad

Después de largo tiempo sin actualizar el blog, lo cual no significa sin reflexionar, pues gracias a “Dios” todavía la pasividad contagiosa no ha atrofiado mis neuronas, luego sigo existiendo y vuelvo para compartir más ideas de las que rondan caóticamente y sin permiso por mi cabeza.

La idea principal que atropella hoy mis pensamientos es bien simple, cómo podemos ser tan iguales y a la vez tan distintos. Se que inicialmente puede sonar tópica y falta de profundidad, pero me explico: a lo que me refiero es que cómo todos construidos con las mismas piezas bioquímicas, con los mismos átomos, podemos llegar a conclusiones y maneras de vivir tan distintas. Las ideas, valores y motivaciones que adquirimos durante nuestra vida son los responsables de cada una de nuestras acciones, por lo que cada uno de nosotros somos lo que hemos vivido y aprendido. Y aún pudiendo ser conscientes de ello y de que nuestro aprendizaje se ve limitado por nuestras vivencias, creemos fervientemente que nuestra verdad, nuestras ideas o creencias (aunque estas estén faltas de fundamento), son la Verdad, y las defenderemos con uñas y dientes.

Pondré un claro ejemplo, tema de numerosas discusiones en comidas familiares y creador de enemistades, la política. Aunque la mayoría de la población (española) no entienda ni conozca parte de las bases de la ideología política de la que es simpatizante, ni pueda llegar a delimitar mentalmente las dimensiones de las repercusiones que puede tener cada una de ellas, discutirá y hasta se peleará por la causa hasta crear claros bandos en la sociedad. Pero lo que me parece gracioso del tema es la conclusión a la que he llegado (que por lo tanto sólo es mi verdad) durante mi vida he observado con pocas excepciones que las ideologías políticas vienen dadas por la familia, y no es que vengan determinada por tu información genética sino por tus vivencias hogareñas, vamos: básicamente lo que has oído decir a tus padres en casa. La política es uno de estos temas en los que poca objetividad cabe, incluso los periodistas, cuya doctrina debería ser este sustantivo, dejan correr la tinta de la subjetividad en sus escritos sobre el tema. Y a pesar de que no habremos intentado estudiar, comprender ni analizar los pros y contras de cada ideología política nos aferramos a la más cercana y la defenderemos, como he dicho, con uñas y dientes.

Y yo me pregunto: ¿realmente es por ahorrar energía en pensar? ¿por comodidad? ¿por necesidad de pertenecer a un grupo? ¿por qué es demasiado complicado crear nuestras propias ideas, mejor buscarlas cocinadas? ¿o es fruto de la pasividad de la que ya hemos hablado? Para mi esta bastante claro que parte del problema proviene de que nos olvidamos de hacernos la pregunta que tanto repetíamos cuando teníamos 4 años: ¿y por qué? . Y esta es la base de cualquier correcto aprendizaje, unos buenos cimientos para la construcción de nuestra verdad.

Claro está que la composición de la esencia y conjunto de verdades de una persona es muy complicada pero queda bien resumido cuando me refiero a que vienen determinadas por sus vivencias: una persona es y piensa según lo que ha aprendido en lo vivido, donde a vivido, la cultura a la que pertenece, las situaciones y conclusiones que estas han desencadenado, y personas que le han marcado. Y aunque no me caracterizo por dejarme llevar por el romanticismo concluyo en que todo compone a una persona, y todo hace que cada composición de ideas sea única, por lo que somos completamente irrepetibles (a pesar de que muchas de nuestras ideas si sean repetidas). Detalle que deberíamos valorar compartiendo nuestras verdades con tolerancia (intentaré aplicarme el cuento) y porqués.

Finalmente recuerdo lo que un amigo me solía decir, y creo que tiene toda la razón. Y es que cada uno de nosotros somos un poco de cada una de las personas que han pasado (no desapercibidas) por nuestra vida, cada una de ellas ha dejado una huella entrando de esta manera a formar parte de la persona que eres. Y aprovecho, una vez entrado en mi inusual romanticismo, para mandar gracias y un cálido abrazo a todas aquellas personas (en especial: Mamá, Papá y hermano) que han colaborado en la construcción inacabada de mi yo, mi esencia y mi verdad.

Violencia

La violencia de género causa más muertes e incapacidades, en mujeres de 15 a 44 años, que el cáncer, la malaria, los accidentes de tráfico y la guerra.

No hacen falta palabras para decir "estoy contigo"

Escucha y sueña

Hoy he extendido la lista musical, escucha, espero sorprenderte con alguna canción o por lo menos que fluyan sensaciones.
Y como siempre abiertos a cualquier comentario, cuéntanos.

...

Vive como piensas o un día despertarás pensando como vives. Este es el riesgo que corremos todos, abrir los ojos un día y descubrir que no somos quien queríamos o creíamos ser. Seguir impulsados por la pasividad que arrastra esta sociedad, y no actuar y vivir acorde a nuestros pensamientos, son los peores crímenes que podemos cometer contra nosotros mismos; el tiempo se ocupará de que dejemos de ser quien somos.

Vive como piensas, o pensarás como vives

La pasividad vacía nuestras conciencias, y si algo podría no gustarnos nos limitamos a mirar hacia otro lado para que desaparezca. ¿Nuestra función? Consumir. Poca responsabilidad para tanta inteligencia, y aún así desperdiciamos nuestra arma más importante con la que guiamos el mundo a su destrucción, no, perdón por la equivocación, sólo cavamos la tumba de gran parte de la vida de la Tierra mientras redactamos nuestra propia extinción, Crónica de una muerte anunciada, el mundo seguirá, con nosotros o sin nosotros. Y como el final de la película no nos gusta nos tapamos los ojos para no verlo, nos da miedo, sin embargo seguiremos comprando los tomates en bandejas de poliespan, bien protegidos y envueltos, como si de un tesoro se tratara, mientras tiramos toneladas de ellos y gente muere de hambre.
¿Dónde está el fallo? ¿quién tiene la culpa? ¿los gobiernos? ¿los empresarios? ¿la publicidad? No, cada uno de nosotros, todos tenemos la culpa, yo misma, cuando mi acción más importante del día es comprarme una crema para el grano que me ha salido en la frente. Somos fachada y poco más; agotamos la energía finita del planeta dónde vivimos (no nuestro planeta, pues sólo estamos de alquiler) y no somos capaces de utilizar ni un ápice de la glucosa del riquísimo plato de espaguetis que nos hemos comido en pensar y criticarnos a nosotros mismos, y lo más importante, en ser conscientes de las repercusiones que tienen cada una de nuestras acciones. Sin ir más lejos cada botella de agua que nos bebemos tardará 1000 años en degradarse, nosotros moriremos y la botella quedará. ¡Ah! ¡pero yo reciclo! Sí, ya somos muchos los que reciclamos y los gobiernos se limpian sus conciencias vendiéndonos el reciclaje cómo si fuera la salvación del planeta, ups me vuelvo a equivocar, nuestra salvación, pero esa no es ni mucho menos la solución, y cuidado no digo que no reciclemos, reciclar ayuda pero no asegura nuestro futuro ¿sabéis lo que cuesta separar las tres capas de un tetrabrik? Yo no lo se, pero seguro que mucha energía. Mientras sigamos produciendo 1’5 kg de basura por persona al día y sigamos consumiendo las barbaridades de luz que malgastamos de manera inmadura e inconsciente nuestro futuro no estará asegurado. En este aspecto todos somos unos adolescentes a los que las hormonas (la publicidad) no dejan pensar con claridad. Marionetas. ¿Y qué podemos hacer? Declararle la guerra a los plásticos y envoltorios, apostar por el vidrio y por la bici, ir a la frutería con nuestra bolsa de tela, cambiar los cruasanes envueltos y reenvueltos individualmente por los de la panadería…cambiar estas y muchas más costumbres.
Cambiar nuestra rutina dudo que sea una idea tan alocada, ¿o somos esa cola de hormigas que en cuanto se obstaculiza llega el Apocalipsis y cada individua empieza a correr y a desesperarse sin rumbo? Pues parece ser que sí, somos eso y una plaga de langostas en un cultivo de cereales, lo arrasamos todo, y cuando se acaben los cereales o emigramos o estamos muertos. Que exagerada, que pesimista pensarán algunos, si piensas eso, documentate, un humilde consejo.
Y mientras escribo esto y trato de convencerme a mi misma y a quien decida leer esto de que la vida que llevo no es la correcta, asiento con la cabeza y decido cambiar mi rutina pero aún así dudo de mi fuerza de voluntad y de que tenga alguna repercusión en el apetito de esa plaga de langostas y ahora es cuando me desborda pensar que la energía que gasta nuestro cerebro, esos espaguetis, seguirá siendo destinada a la prensa rosa, al fútbol, a averiguar que me pongo mañana y a conversaciones superficiales. Entonces intento recordar lo que dijo John Lennon en Imagine:
“You may say I'm a dreamer
But I'm not the only one
I hope someday you'll join us
And the world will be as one”
Pero vuelvo a la idea inicial y me remito al título de otro libro (que me dio mucho en que pensar) para expresarla, Todavía no somos humanos. Hommo sapiens sapiens (hombre que piensa), así nos hacemos llamar, sí, ¿pero en qué coño pensamos? La inteligencia la tenemos pero ¿sabemos usarla?

Presentación

Simplemente explicar el origen del nombre de mi blog para quien no le resulte familiar:
Noctiluca es el nombre de un género de protozoos marinos, forma parte de la vida marina que no podemos ver sin la ayuda de un microscopio, plancton. Y su luz es esa que me cautivó y me llenó de curiosidad cuando era pequeña. No se si os habéis bañado alguna vez de noche en el mar, pero si lo habéis hecho quizás os habéis percatado de unas pequeñitas luces en el agua que sólo salían cuando agitabas el agua. Bien pues os la presento, esa es Noctiluca scintillans, unos dinoflagelados que tiene unos filamentos citoplasmáticos con gránulos fluorecentes, y este es el milagro que hace que nos demos cuenta de su existencia.